No solo los ayuntamientos resolverían el problema de la basura y la improvisación de vertederos en sus minicipios y el Distrito Nacional si trabajaran de la mano con las Juntas de Vecinos, sino que hasta el Gobierno central terminaría solucionando deudas comunitarias de años.
El desarrollo de estas organizaciones comunitarias se comenzó a promover en el año 1978, en la gestión del doctor Franco Badía en el Ayuntamiento del Distrito Nacional.
Su objetivo ha sido siempre promover el desarrollo y defender los intereses de la comunidad, velar por los derechos de los vecinos y colaborar con las autoridades del Ayuntamiento y del Gobierno central en la búsqueda de soluciones a los problemas comunes.
En su gestión edilicia (1982-86), el doctor José Francisco Peña, que solo administró poco más de RD$122 millones, instituyó el Departamento de Acción Comunitaria del Ayuntamiento del Distrito Nacional, que fortaleció la participación de las Juntas de Vecinos.
Con el apoyo de los comunitarios, el doctor Peña Gómez no solo logró controlar el agobiante problema de la recolección de la basura, sino que se eliminaron los vertederos improvisados. Una muestra de coherencia entre práctica y discurso.
También durante su período de gobierno (2000-2004), y con la integración comunitaria, el presidente Hipólito Mejía; logró eliminar los tediosos y múltiples basureros que por más de 15 años afectaron el Distrito Nacional. El programa ejecutado se llamó «Saneamiento de los Barrios Marginados (SABAMAR).
Sin embargo, hoy en día, la participación de las Juntas de Vecinos no es un tema prioritario, o de alguna manera, no está siendo abordada desde la concepción que las políticas sociales especifican.
Actualmente, departamentos creados en las alcaldías, para «trabajar con las organizaciones comunitarias», solo las toman en cuenta si sus dirigentes responden al Gobierno central o al alcalde de turno. Que pena!!
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