Santo Domingo._ Cientos de escuelas en construcción llevan años paralizadas en República Dominicana, representando un desperdicio de recursos, un caldo de cultivo para una serie de anomalías y de grandes consecuencias a la educación del país.
Esa construcción de planteles implicaron una inversión cuantiosa en el gobierno del licenciado Danilo Medina a través del Programa Nacional de Edificaciones Escolares. Fueron asignadas mediante sorteos en un intento por dar oportunidad a ingenieros de ser contratistas del Estado.
Liceos y grandes escuelas se observan construidas en lugares inadecuados, otras un 80% terminadas, un número considerable son viviendas de nacionales haitianos; se dañaron equipos de cocina y laboratorio que se habían comprado y muchos planteles sin construir, pese a que fueron adquiridos los terrenos.
Unos 720 planteles iniciados dentro del programa en el gobierno de Medina se encuentran en situaciones deplorables. Fueron levantados por el exmandatario más de 1,927 planteles apoyado en el 4% del Producto Interno Bruto (PIB), de los cuales 1,676 corresponden a centros de educación especial, inicial, básica, secundaria, politécnicos y 252 son estancias infantiles.
El gobierno de Medina construyó más aulas que ninguna otra gestión de las últimas décadas, pero se llevaron a un ritmo muy acelerado, para exhibirlas como unos de sus logros, produciendo graves consecuencias al sistema educado y al presupuesto del Estado.
La adjudicación de todas esas obras se hicieron mediante sorteos para dar igualdad de oportunidades a los profesionales de la construcción, pero se demostró que no fue el método más idóneo.
Una gran cantidad de esas obras superaron los RD$80 millones, por lo que muchos ingenieros se quedaron sin recursos, mientras otros optaron por exceder el 25% del presupuesto contemplado en la ley, creando problemas legales.
También muchos ingenieros que resultaron ganadores no tenían la capacidad técnica para construir esas obras, quedando evidente con muchas de las escuelas que tienen un promedio de 4 años y medio paralizadas y en otros casos ni siquiera han iniciado.
Unos RD$175 mil millones se han invertido en la construcción y rehabilitación de infraestructuras escolares durante el periodo 2013-2021, siendo un problema para la calidad del gasto, dado la cantidad de escuelas en deterioro progresivo por la paralización de los trabajos, poniendo en riesgo la inversión pública.
Los 720 planteles que se encuentran detenidos en construcción suman un gasto ejecutado o pérdida aproximada de RD$40 mil millones hasta el año 2021, según el trabajo de investigación presentado por la periodista Nuria Piera.
Debido a las fallas en la identificación de los lugares para construir nueva escuelas, el actual gobierno de Luis Abinader se ha visto en la necesidad de invertir más dinero en reubicar los centros educativos, pues los presupuestos se hicieron de manera estándar sin tomar en cuenta el tipo de suelo y las soluciones de ingeniería según la ubicación.
Según datos del ministerio de Educación, a la fecha hay unos 127 centros en proceso de recisión de contrato, de los cuales 70 están siendo intervenidos legalmente por descapitalización de los contratistas, de 716 contratos abiertos un 60% están sin solares, y el actual gobierno ha tenido que hacer un censo para conocer su estatus.
El Programa Nacional de Edificaciones Escolares desde un principio se considera importante para la educación dominicana, pues contempla que las nuevas construcciones fueran adecuadas a la tanda extendida, con grandes comedores, salas de tarea, cocinas, en otros requisitos.
«La labor realizada y el deseo de construir tan prontamente esos planteles, sin la adecuada organización puede que sea la consecuencia que vive el país de ver millones de pesos de un Estado pobre, mal gastados, mal dirigidos», dijo la periodista Nuria Piera.
Algunas de las escuelas paralizadas
Liceo Los Palmeros, del sector Aguas Locas, en Santo Domingo Este, abandonado hace cuatro años, construido en un 78% y adjudicado en el tercer sorteo de obras por más RD$72 millones.
Escuela República de Haití, del ensanche Luperón, en el Distrito Nacional, contratada por más de RD$68 millones y ejecutada en el 77%.
Escuela Básica Buen Nombre, de La Victoria, Santo Domingo Norte, su levantamiento inició en el 2013 y esta construida en un 87 por ciento.
Escuela Básica Pueblo Viejo, en la comunidad del mismo nombre, en Azua, sorteada en el 2013 por más de RD$36 millones y paralizada desde el 2016.
Liceo profesora Elsa Mojica, en Las Caobas, de Santo Domingo Oeste, paralizada hace ocho años y construida al lado de la cañada de Guajimía.